El Gobierno del Presidente Nayib Bukele sigue comprometido a trabajar con los salvadoreños al centro de sus políticas, lo que ha determinado el rumbo correcto en búsqueda para el desarrollo y progreso del país.
El Presidente de la República, Nayib Bukele, anunció, en cadena nacional de radio y televisión, que optará por la reelección presidencial. “Anuncio al pueblo salvadoreño que he decidido correr como candidato a la presidencia del 2024”, comentó.
De acuerdo con el mandatario salvadoreño, la reelección, ahora, es posible gracias a la soberanía que tiene El Salvador y a la balanza existente entre los Órganos del Estado, pues la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) resolvió habilitar la candidatura del Presidente Bukele, para que los salvadoreños decidan el rumbo correcto del país, que continúe de la mano del liderazgo del actual mandatario.
La población ha vivido la Verdadera Independencia este 15 de septiembre y gracias a decisiones estratégicas, como el régimen de excepción y el Plan Control Territorial, que han logrado la reducción drástica de los homicidios, extorsiones y demás delitos graves en comparación con los gobiernos anteriores cuando para 2015 El Salvador fue catalogado como el país más violento del mundo, a causa del accionar de los grupos terroristas.
Los salvadoreños, además, han visto los cambios durante los más de tres años de Gobierno, gracias al liderazgo del Presidente Bukele, y esto no es solo perceptible en las encuestas, sino en el territorio pues los salvadoreños, hoy, viven en un país soberano, libre e independiente. Incluso en la pandemia, El Salvador fue reconocido internacionalmente por su buen combate contra el COVID-19.
“Para que podamos continuar este camino que hemos iniciado; el camino que, por primera vez en la historia, hemos demostrado que es el correcto”, puntualizó el Presidente Bukele.
Son las fuerzas externas que, por tres décadas, impidieron la Verdadera Independencia, soberanía, paz, y Libertad para el país. Fue un sistema nefasto y corrupto que secuestró ese anhelo de progreso, pero que ahora está abolido. El compromiso del Gobierno del Presidente Bukele es hacer realidad los ideales que rezan en la bandera salvadoreña: ¡Dios, Unión, Libertad!