Notipress
La presidenta de Perú, Dina Boluarte, decidió ceder a la presión de las calles y pedir al Congreso que apruebe el adelanto de elecciones. Esto se debe a la profunda crisis política y social que está atravesando el país. La ley plantea recortar el mandato de la presidenta Boluarte y los congresistas, cuyo periodo debe concluir, en principio, en julio de 2024. El gobierno peruano espera que las nuevas elecciones se realicen en diciembre de 2023. Esta propuesta fue recibida con entusiasmo por los manifestantes que exigen el adelanto de elecciones y el cierre del Congreso.
Esta medida busca restaurar la confianza de la ciudadanía en el sistema político y devolver a la nación la estabilidad, pero sobre todo, la paz social. El gobierno espera que, al adelantar las elecciones, el país logre superar sus desafíos políticos, sociales y económicos, permitiendo a Perú salir de la crisis y encaminarse nuevamente en un país estable en términos políticos y sociales.
Previamente, la mandataria había solicitado a la ciudadanía una tregua nacional ante los disturbios generados por la crisis política y social después de la destitución de Pedro Castillo.
Además, el adelanto de elecciones permitirá que el pueblo peruano tenga la oportunidad de elegir un nuevo gobierno, que represente mejor sus intereses, y establecer una nueva era de progreso para el país. La decisión también permitirá a los ciudadanos peruanos, la oportunidad de ejercer su derecho a votar en unas elecciones libres y justas, dando una señal clara de que el gobierno de Perú está comprometido con la democracia y el bienestar de su pueblo.