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Jassim Bin Hamad bin Jaber Al Thani, jeque de Qatar, ha mostrado interés en la adquisición del club de futbol inglés Manchester United en una participación del 100 por ciento de la propiedad. Sin embargo, la Unión de Asociaciones Europeas de Futbol (UEFA por sus siglas en inglés) ha encontrado algunos obstáculos para que esta adquisición se lleve a cabo.
Principalmente, la UEFA destaca el conflicto que existe entre la compra de este club y la participación que Qatar posee sobre el club francés Paris Saint-Germain (PSG). De acuerdo con los estatutos de la UEFA, ningún club puede participar en cualquier capacidad en la administración de la gestión y el rendimiento deportivo de cualquier otro club participante.
Esto implica que Nasser Al-Khelaifi, presidente del PSG, no podrá tener participación durante las negociaciones que conforman el comité para la adquisición del club inglés. En términos prácticos, el club PSG al ser propiedad de Qatar Sports Investments, no formará parte de la cartera de inversores de Qatar Investment Authority, la cual sí tiene la facultad de adquisición.
Pese a que ambos forman parte del Estado de Qatar, cada una posee modelos diferentes de negocio, esto les permite operar de manera diferente pese a compartir origen. Ante este reto, el Fair Play financiero (FPF) de la UEFA busca identificar cualquier inconveniente que se presente, para garantizar la sostenibilidad financiera del futbol europeo.
Esta herramienta busca establecer límites en todos los clubes europeos tanto en la forma en la que invierten dinero, como en la forma en la que lo gastan evitando deudas innecesarias. En sumatoria, el Organismo de Control Financiero del Club (CFCB) es el encargado de la ejecución del FPF y hacer cumplir las normas correspondientes.
Tomando esto en consideración los clubes Manchester United y PSG se encuentran en investigación para garantizar que ninguno caiga en incumplimiento del reglamento. En este sentido, la adquisición del Manchester United ha generado que el CFCB genere las advertencias correspondientes, para así evitar algún castigo del reglamento.
Reducción de puntos, prohibición en el registro de nuevos jugadores e incluso la prohibición de participar en futuras competiciones de la UEFA podrían ser las sanciones que enfrentarían. Sin embargo, Sir Jim Ratcliffe multimillonario británico, dueño de la compañía INEOS comercializadora de químicos, ha mostrado interés en la adquisición del club.
Mediante un comunicado de la compañía INEOS, se recalcó el interés por adquirir la mayoría de la propiedad del club Manchester United, buscando regresar la gloria del club. Ratcliffe reiteró la intención de convertir el club en el número uno del mundo, generando un ambiente óptimo no solo para los jugadores sino para todos los aficionados. Esta adquisición ayudaría al club a estar al nivel de Arabia Saudita y de los Emiratos Árabes en la Premier League, donde la imagen del estadio Old Trafford tendría nuevos aires.