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Donald Trump y Kamala Harris acordaron su participación en el debate presidencial general del próximo 10 de septiembre, mismo que será auspiciado por la cadena ABC. De acuerdo con Ballotpedia, la popularidad del exaspirante demócrata Joe Biden tuvo una caída considerable en la primera mitad del 2024; sin embargo, los ejes temáticos permanecerán en la contienda, tales como las políticas migratorias y respuesta a la inflación.
Trump asegura que los demócratas no son rivales para el próximo debate
Tras la salida de Biden de la contienda electoral el pasado 21 de julio, el actual presidente de Estados Unidos ha recibido críticas por parte del candidato republicano: Donald Trump. A través de su perfil oficial en la red Truth Social el pasado 15 de mayo, el expresidente aseguró que el mandatario es el peor oponente que ha tenido en un debate.
Con respecto a la actual candidata del Partido Demócrata, Kamala Harris, Trump aseguró en sus redes que no es capaz de seguir un debate de manera profesional. Esta opinión, que sostienen los simpatizantes del Partido Republicano, se basa en las intervenciones de Harris bajo el cargo de actual vicepresidenta.
En una serie de entrevistas realizadas en cadena nacional, la candidata demócrata nominada fue señalada por los republicanos por presuntamente evadir las respuestas ante temas clave. Entre ellas, Republic World reveló una discusión en la cual Kamala Harris no emitió una respuesta sobre cómo la administración actual bajará las presiones inflacionarias, especialmente en la canasta básica.
Migración y presiones inflacionarias en el ojo de los temas para la discusión de las candidaturas
Si bien el exmandatario Trump destacó las presuntas carencias de debate de sus rivales demócratas, los señalamientos públicos de Harris apuntan a una preparación para los temas clave en la discusión. Bajo esta línea, los dos partidos consideran relevante abordar la política migratoria, la inflación, y el incremento de impuestos.
Para la candidatura demócrata, el recorte de impuestos sobre las familias trabajadoras y el aumento de recaudación a las grandes empresas son requisitos para impulsar las finanzas estadounidenses, señaló la Casa Blanca. En comparación, la candidatura republicana busca la reducción de recaudaciones en áreas como seguridad social, mientras mantiene una postura más amigable con las grandes empresas.
Respecto a las políticas migratorias, el discurso de ambos partidos indica una distancia respecto al cuidado de las personas que ingresan de manera indocumentada. Pese a la postura de mano dura de Trump luego de implementar las deportaciones masivas de Título 42 en 2020, la gestión de Joe Biden y Kamala Harris retomó un modelo migratorio estricto. Este modelo se basa en negar el asilo político, deportar a los migrantes, e incrementar la vigilancia para restringir el acceso fronterizo.
Por su parte, las presiones inflacionarias se encuentran entre los temas que gozan de menos declaraciones oficiales. De cara a la pandemia por Covid-19 y las recientes coyunturas geopolíticas, el gobierno demócrata ha incrementado las tasas bancarias 11 veces, informó Investopedia.
Finalmente, de cara a las elecciones del 5 de noviembre de 2024, la opinión puso el foco en la salud de las finanzas públicas en Estos Unidos. Al respecto, la deuda pública de la administración Biden-Harris fue menor a la de Donald Trump, a pesar de la inflación de 1.9% de la administración republicana, informó CRFB.