A partir del año 2025, El Salvador se convierte en una nación financieramente independiente: El presupuesto que se generará con recursos propios consta de $9, 663 millones y con una brecha de cero dólares.
Tras décadas y marcando un hecho histórico, por primera vez los diputados de la Asamblea Legislativa recibieron el proyecto de Ley del Presupuesto General del Estado, presupuestos especiales y autónomas y la Ley de Salarios para el ejercicio fiscal 2025, mismo que será completamente financiado, por lo que no habrá necesidad de emitir un solo centavo de deuda para la cancelación de pagos corrientes.
El ministro de Hacienda, Jerson Posada, informó que el monto para el próximo año asciende a $9, 663 millones y solo se cubrirá con lo que emita a nivel nacional, sin pedir préstamos. Dicho monto es con una disminución de $970 millones respecto al presupuesto estimado de cierre de 2024, e incluye la totalidad de gastos estimados para el otro año sin necesidad de financiamiento adicional.
Ante esto, el presidente de este órgano de Estado, Ernesto Castro, señaló que “este presupuesto es histórico. Por primera vez, viene totalmente financiado y eso representa un antes y un después como parte del plan económico que se viene trazando”.
Esto ocurre luego de que el pasado 15 de septiembre, el Presidente de la República, Nayib Bukele, anunciara dicho compromiso en su discurso por el 203 aniversario de la Independencia: “Presentaremos el primer presupuesto completamente financiado. El Salvador ya no gastará más de lo que produce anualmente”.
Es por eso que el ministro de Hacienda dijo que: “Hoy estamos entregando el primer presupuesto completamente financiado, los ingresos corrientes estimados financiarán los gastos como remuneraciones, bienes y servicios, transferencias corrientes y pago de intereses de la deuda”.
Además, dijo que los ingresos de capital, como préstanos y donaciones ya aprobadas por la Asamblea Legislativa van a financiar el gasto de capital que en su mayoría está concentrado en los proyectos de inversión.
“A partir del próximo año, El Salvador ya no gastará más de lo que recauda anualmente, continuaremos garantizando el cumplimiento de las obligaciones nacionales e internacionales”, comentó Posada.
Se fortalecerá con $1,700 millones al programa anual de inversión pública, lo que incrementará $131.9 millones –equivalente al 8.4% de crecimiento interactual- que generará un efecto catalizador en la inversión privada y por consiguiente en el crecimiento económico del país.
El documento entregado por el ministro pasará a la Comisión de Hacienda para ser estudiado, con antelación, junto a los representantes de cada una de las carteras de Estado.
El Gobierno ha realizado un manejo eficiente de los recursos disponibles en el presupuesto, lo cual se ha visto favorecido por el fortalecimiento de los mecanismos de recaudación. Parte de las estrategias implementadas que han contribuido es la del Plan Antievasión, con el cual se ha logrado una recolección efectiva, que se traduce en múltiples beneficios para los salvadoreños.
“El proyecto de presupuesto 2025 está adaptado a las necesidades de los tiempos actuales”, dijo Posada, quien aseguró que para lograr la independencia económica del país se continuará con la buena gestión de los recursos, con la inversión de los impuestos de manera eficiente y priorizando el gasto público de los sectores estratégicos como salud, educación y seguridad.
¿Qué es el Presupuesto General de la Nación?
Estos fondos son el instrumento que permite la implementación y ejecución de las políticas públicas en el país. Este contiene las estimaciones de los ingresos a obtener, los gastos totales e inversiones a realizar en un periodo determinado.
La base legal y obligación de tener un presupuesto para cada año, la metodología para su formulación, ejecución y control está establecido en los artículos 167 y del 226 al 229 de la Constitución de la República, así como en la Ley Orgánica de Administración Financiera del Estado y su reglamento.
El Presupuesto General de la Nación comprende la estimación de los ingresos que recibirá el gobierno en concepto de impuestos, multas, arrendamientos de activos, donaciones, préstamos internos y externos, los cuales financian los gastos para satisfacer las necesidades de la población.
Los ejes estratégicos del gobierno para el 2025
El proyecto del presupuesto tiene como prioridad los tres ejes centrales de las políticas públicas gubernamentales: salud, educación, seguridad y defensa.
Para esto, Hacienda está destinando $3, 609.6 millones, que suman el 37.4% de todo el presupuesto desglosado de la siguiente manera:
Educación tendrá una asignación de $1,535.8 millones, con los que se asegurarán los recursos para programas y proyectos relacionados a la Ley Crecer Juntos Para la Protección Integral de la Primera Infancia, Niñez y Adolescencia. Bajo ese contexto, Hacienda destinó $29.7 millones para el Consejo Nacional de la Primera Infancia, Niñez y Adolescencia; $14.1 millones para el Instituto Crecer Juntos; $218.5 millones para la atención al Programa de la Primera Infancia.
Salud totalizará $1,170.4 millones, por lo que se fortalecerá la atención al Programa Creciendo Saludables Juntos, Desarrollo Integral de la Primera Infancia por $80 millones. También, se ha asignado $25 millones al Programa Integrado de Salud y se destinó fondos para el mejoramiento de infraestructura y equipamiento de la red nacional de hospitales y unidades de salud por $3 millones.
Para el sistema de emergencias médica, dicha cartera de Estado destinó $8.6 millones para contar con este campo de una manera amplia y con una respuesta médica rápida a nivel nacional.
Seguridad y defensa le será asignado $903.4 millones.
Por otra parte, en el ramo de obras públicas se hará grandes inversiones para seguir impulsando la transformación de la infraestructura vial y el desarrollo local de los municipios. Es por eso que para la Dirección de Obras Municipales se presupuestó $140 millones, dijo Posada.
Los subsidios adquiridos por el gobierno para el próximo año
Hacienda destinó $217.4 millones para el financiamiento de los programas de subsidios, que se distribuyen en $114.6 millones al subsidio del gas licuado; $38.7 millones al subsidio del transporte público; y $64.1 millones al subsidio de la energía eléctrica.
Asimismo, se le garantizará el financiamiento para la atención de los veteranos, con una asignación de $192 millones, que incluye recursos para el Fondo de Protección de Lisiados y Discapacitados.
La brecha presupuestaria 2025
Debido a la eficiencia de la administración estatal ha permitido cerrar la brecha del presupuesto de manera gradual.
Desde que el Presidente Bukele llegó al gobierno la brecha presupuestaria ha disminuido, año con año. En 2019, al inicio de su mandato, esta brecha ascendía a $1,200 millones, al año siguiente se redujo a $645 millones y en 2022 fue de $496 millones.
Mientras que la brecha para el presupuesto 2023 ascendió a $472 millones, es decir $26 millones menos que la brecha que se presentó el año 2022.
Para el 2024, los parlamentarios aprobaron una brecha presupuestaria de $338, 600 millones, lo que representó una reducción de 28.32 %.
Para el presupuesto 2025, la brecha será de cero dólares.