Inspectores de la Defensoría del Consumidor llegaron a diferentes restaurantes para constatar que están cumpliendo con los protocolos de bioseguridad para evitar la propagación de COVID-19 entre sus clientes y el personal que labora en los negocios.
El presidente de la Defensoría del Consumidor, Ricardo Salazar, encabezó la jornada de inspecciones en un centro comercial ubicado en la calle antigua a Huizúcar en San Salvador. En el lugar se verificó que en los establecimientos de comida se cumpliera al pie de la letra con los protocolos sanitarios.
“Hemos desarrollado más de 500 inspecciones en lo que va del Plan Navidad 2020. Un 86 % de estas resultó con algún incumplimiento, nos preocupa que no se le esté prestando atención a las medidas de bioseguridad”, expresó Salazar, quien hizo hincapié en la importancia de no bajar la guardia ante la enfermedad.
Durante el recorrido por los restaurantes, los inspectores verificaron que los dispensadores de alcohol gel funcionaran, además que se tomara la temperatura a los clientes al ingresar, entre otras disposiciones.
“Es muy importante que los comercios en general estén aplicando las medidas, tanto para el personal que labora, como a los clientes que los visitan”, dijo el presidente de la Defensoría.
La Defensoría del Consumidor está atendiendo las instrucciones del Ministerio de Salud de corroborar que dentro de los negocios se tomen en cuenta las medidas preventivas para no seguir propagando el virus.
Está comprobado que en los espacios cerrados hay mayor riesgo de contagio del virus, por eso es recomendable permanecer en las áreas abiertas donde la circulación del aire sea natural.