Una sección de dos metros de la Gran Muralla china se desplomó como consecuencia del terremoto de 6.9 grados en la escala abierta de Richter que sacudió el noroeste del país el, informaron medios oficiales.
El tramo derruido data de la Dinastía Ming (1368-1644) y se encuentra en la provincia de Gansu, a 114 kilómetros del lugar donde se situó el epicentro del temblor, recoge el diario estatal Global Times.
La zona ha sido asegurada provisionalmente y ya han comenzado las labores de reconstrucción y restauración, agrega el medio.
El temblor que hizo colapsar una porción del monumento más emblemático de China se produjo en una zona de “población dispersa” de la remota provincia de Qinghai, que con algo menos de 6 millones de habitantes es una de menos pobladas del país.
Aparte del colapso de la muralla, el derrumbe de establos y daños en más de 200 viviendas, el sismo no provocó importantes pérdidas materiales y tampoco víctimas mortales.
Un total de nueve personas resultaron heridas, de las que ocho habían sido ya dadas de alta al día siguiente, y otras 65 fueron reubicadas temporalmente.