El Salvador-La montañista Alfa Karina Arrué sigue cosechando reconocimientos tras convertirse en la primera persona salvadoreña en conquistar la cima del Monte Everest que, con sus 8,848.86 metros sobre el nivel del mar, es considerada la montaña más alta del mundo.
Este martes, durante la sesión plenaria 65, los diputados de la Asamblea Legislativa aprobaron con 78 votos a favor nombrar Hija Meritísima a Arrué quien llevó la bandera de El Salvador al punto más alto del mundo la noche del miércoles 11 de mayo (jueves 12 en Nepal).
“Hoy es un día importante y trascendental para el deporte nacional porque estamos honrando y reconociendo a una gran mujer que nos ha demostrado que no hay imposibles. A sus 46 años, Alfa logró llegar a la cima del Everest y cumplir el sueño de toda una nación, dejando un legado de inspiración para las nuevas generaciones y en especial para nuestros atletas”, dijo la diputada Lorena Fuentes, de Nuevas Ideas y quien presentó la iniciativa ante el pleno.
En la misma línea, la parlamentaria destacó el apoyo económico total que la montañista recibió por parte del Instituto Nacional de los Deportes de El Salvador (INDES), ya que se erogó a la Federación Salvadoreña de Montañismo y Escalada $60,000 para la expedición de la nacional.
Un punto importante es que Arrué logró su cometido en su segundo intento, ya que el año pasado estuvo a 800 metros de llegar a su objetivo, pero alcanzó el campo cuatro del Collado Sur, a 8,063 msnm, pero estar a -46 grados centígrados y con vientos de 150 kilómetros por hora, la hicieron desistir y descender.
En tanto, el diputado Ernesto Castro, de Nuevas Ideas y presidente de la Asamblea Legislativa, dijo que con este nombramiento reconocen el esfuerzo que la montañista realizó para llevar la bandera de El Salvador a la cima del Everest.
“En el pleno aprobamos nombrar a Alfa Karina Arrué como Hija Meritísima de El Salvador, el mayor galardón que esta Asamblea Legislativa puede entregar. Reconocemos así el esfuerzo que la llevó a ser la primera salvadoreña en llegar a la cima del Monte Everest. ¡Gracias, Alfa, por tu ejemplo!”, dijo Castro.