Desde hace 20 meses, El Salvador se mantiene bajo un clima de paz y tranquilidad, debido a que el Gabinete de Seguridad ha logrado encarcelar a más de 73 mil pandilleros. Hoy, tras la ampliación de la medida, las comunidades recuperadas seguirán perteneciendo a los buenos pobladores.
Nuevamente, los diputados de la Asamblea Legislativa avalaron, con 67 votos, la vigésima extensión del régimen de excepción con la finalidad de continuar protegiendo la vida de los salvadoreños y de seguir bajo un clima de paz y libertad.
La guerra en contra de los grupos terroristas persiste, pues los resultados son evidentes. Las últimas cifras brindadas por el ministro de Justicia y Seguridad Pública, Gustavo Villatoro, reflejan que con la implementación del régimen de excepción se ha logrado capturar a 73,272 terroristas, han decomisado un total de 3,364 armas de fuego, 6,174 vehículos relacionados a actos vandálicos y 18, 223 celulares utilizados para extorsionar a la población.
Las autoridades informaron que con dicho régimen, que estará vigente por otros 30 días, se han incautado $3 millones en efectivo y han logrado decomisar más de 6.2 toneladas de drogas.
“Pareciera obra de un milagro lo que estamos viviendo, ya que los números no mienten. No queda más que darle gracias a Dios por lo que estamos viviendo y al mandatario Nayib Bukele por la decisión valiente que tomó en el momento”, manifestó el presidente de este órgano de Estado, Ernesto Castro.
En la sesión plenaria número 131, los legisladores recordaron que el país se aplicó este mecanismo desde el 27 de marzo de 2022 y a partir de esa fecha se ha garantizado la seguridad y libertad en barrios y colonias, que históricamente fueron dominados por estructuras delincuenciales.
Las cifras positivas para el país
A raíz del régimen de excepción, la tasa de homicidios también ha reducido. En 2021, el porcentaje de muertes violentas cerró el año con 18.1 % y hoy las proyecciones apuntan a que 2023 se cerrará con una tasa de 2.3 %, comparable con la de Canadá.
Incluso, en la región centroamericana El Salvador supera por mucho a Guatemala y Honduras, naciones que reportan más de 2,000 asesinatos; mientras que Costa Rica, que en el pasado era considerado como el país más seguro del istmo, ha superado las 700 muertes a causa de la violencia en los primeros 10 meses de este año.
Las estadísticas de la Policía Nacional Civil (PNC) indican que entre el pasado 1 de enero y el 1 de noviembre se registraron 131 homicidios a escala nacional.